La villa de Baiona fue el primer lugar del Viejo Continente en conocer la existencia de un nuevo mundo. En 1493 desembarcó en ella Martín Pinzón, al mando de la carabela Pinta, con la noticia de la existencia de otro mundo y las pruebas que lo corroboraban. En recuerdo de aquel hecho histórico, todos los años tiene lugar en la playa una dramatización que comienza con el desembarco de Pinzón y su maltrecha tripulación, con un par de indígenas traídos de las nuevas tierras y productos alimenticios desconocidos hasta entonces en estas latitudes que darían credibilidad a las fabulosas nuevas del acompañante de Colón en aquella gesta.
Baiona entera se vista al estilo medieval. La zona portuaria y las calles del casco antiguo se convierten en un gran mercado al aire libre, con puestos de viandas y de productos artesanales, y la única música que se escucha es medieval y en vivo. Por las calles pasean nobles, caballeros, mercadores, artesanos, campesinos y criadas, en una auténtica y unificada recreación del ambiente del pasado, con los toldos de lona de color granate, y los puestos respetuosos con la estética medieval, tanto en sus materiales como en su diseño. En las plazas, algunos artesanos hacen demostraciones en vivo de su oficio; los trovadores recitan romances y cantigas; caballeros y escuderos hacen demostraciones de cetrería; cómicos y malabaristas representan sus espectáculos… No falta tampoco la escenificación, en la playa, de una lucha de caballeros por el amor de una princesa, que pone el broche de oro a una de las mejores fiestas históricas que se celebran en Galicia.
Para no perderse:
Dramatización en la playa del desembarco de la tripulación de Pinzón y la notificación del descubrimiento de un nuevo mundo.
Fuente: turgalicia.es